Llegan las tan anheladas fiestas navideñas, con sus luces y sus muchas celebraciones que atender. La Navidad es una época especialmente ilusionante para las niñas y los niños.
Cuando eres niña, la Navidad es magia, alegría, recuerdos bonitos y encuentros inolvidables. Mi desafío, el cual acepto encantada un año más, es estar a la altura de nuestros pequeños soñadores. También conseguir que sus mamás y papás vuelvan a mirar la Navidad con ojos de niñas y niños.
Family days en Navidad
Algunas empresas celebran durante estos días bonitas jornadas familiares, en las que se invita a las hijas e hijos de la gente de la plantilla a desayunar o a merendar. Estas jornadas suelen estar en muy buena sintonía con mis shows de animación, con Pintacaras, diversión y figuras con globos. También con algunos talleres participativos así como espectáculos profesionales de Magia, Payasos y/o Burbujas de Jabón.
Los vestuarios pueden variar según el formato de entretenimiento escogido, si bien suelo recomendar vestuarios de Duendes, Elfos navideños o Pajes. Disfraces que intento siempre mejorar para que se adapten a los tiempos y recuerden con simpatía las bonitas fechas en las que estamos.
Visita de Papá Noel/Reyes Magos
La experiencia de entregar tu carta de deseos personalmente a Papá Noel o a los Reyes, puede ser un recuerdo bonito que dure mucho tiempo. Por eso, propongo siempre cuidar al máximo los detalles, tal y como me gusta hacer, para que resulte lo más realista posible.
Hay empresas que deciden incluirlo dentro de un servicio de animación y entretenimiento, así como se suelen contratar en puestos Navideños o incluso en visitas a domicilio. Mi consejo es que pidáis fotos y valoréis el posible éxito según las edades de vuestros peques. En general, a partir de siete u ocho años son bastante exigentes con la calidad de los materiales ;).
Cuando era niña tuve algunas Navidades bonitas y considero que es justo intentar devolver lo bueno que has recibido en la vida, siempre que sea posible y esté en mis manos. De la misma forma, me parece a veces que la mejor Navidad que se recuerda, es aquélla que nunca ocurrió. Como si el deseo de una Navidad perfecta de familia, nieve y villancicos, de tan grande como es, se hubiera convertido en recuerdo.
Es una duda interesante, como la de a partir de qué día se debe empezar a desear felices fiestas a la gente. Hay muchas celebraciones que preparar, así que por mi parte voy a empezar hoy mismo. Felices pascuas si no nos vemos… ¡En la fiesta!